Un bonito concierto

Ayer fue un viernes diferente a lo que acostumbro (tumbarme en la cama cansada del trabajo de toda la semana), ayer fui al concierto que Beirut ofreció en el Lunario del Auditorio Nacional.

Llegué al recinto acompañada de Aya (creo que nunca he ido a un concierto sin esta mujer) y un amigo suyo alrededor de las 8:30. Como vimos que no había mucha fila y era temprano (el concierto estaba planeado para las 10:00pm) nos dirigimos a los carritos que hay junto al Auditorio para comprar papas, agua y hotdogs.

Regresamos a la fila donde Aya me contó que en Twitter vio la frase: "Hi5 es la cumbia de las redes sociales", me reí mucho pero acepto que tengo mi perfil ahí, que nunca checo pero ahí está.

Finalmente entramos al Lunario, no sin antes perder mi botella de agua que no pude introducir al lugar. Nos instalamos en una barra a esperar al concierto sintiendo las ansias características del: "ya quiero que empiece".

A las 10:00 con puntualidad inglesa salió Beirut con su banda: bajo, trompeta, batería, acordeón y otra trompeta. El concierto inició festivo y alegre como toda la música de este artista; la gente se emocionaba con cada nota y la buena vibra se sentía en el aire. Varias chicas del público le gritaban a Beirut que lo amaban, después de varios de estos gritos Beirut contestó: "yo también te amo, pero no puedo verte". Un tipo insistió: "¡te amo cabrón!".

Antes de tocar "Mount Wroclai (Idle Days)" Beirut nos dijo en español: "canta, no llores" con lo que se llevó la ovación del público. Esta canción fue mi favorita de todo el concierto, ya me gustaba mucho antes pero oírla en vivo me cautivó.

El concierto duró 1 hora 30 minutos aunque Beirut dijo que iba a tocar toda la noche ("si wey" contestó Aya). Fue un concierto muy bonito, Beirut se portó muy amable y entregado y el público se emocionó y coreó todas las canciones. Lo malo fue que no trajo a la banda de Oaxaca y por tal motivo algunas canciones se quedaron a medias.

Cuando encendieron las luces del Lunario mis amigos y yo nos quedamos donde estábamos esperando que saliera toda la gente, yo estaba pensando en la inmortalidad del cangrejo cuando Aya me dice: "mira, ahí está el de Café Tacuba". Volteé y vi que Emmanuel del Real alias Meme estaba a una distancia de cinco pasos así que sin dudarlo me acerqué a él para pedirle que se sacara una foto conmigo a lo que accedió muy amablemente.

Después de eso Aya nos condujo hasta la salida pero por un error de sentido de orientación acabamos en lo que parecía una fiesta VIP donde vimos a Ely Guerra platicando y saludando a varios amigos. La vi solo unos instantes pero puedo decirles que en persona es muy bonita.

Salimos del lugar, Aya compró la clásica playera; yo no quise porque por lo general esas playeras siempre acaban como sustituto de pijama y para recuerdo ya tengo mi boleto.

Si aún no conocen a Beirut este es el momento, se los recomiendo ampliamente.

PD. Saqué muchas fotos y esta fue la mejor, creo que de fotógrafa me muero de hambre.